17/1/13

CONFLICTE A MALI

De nou un país africà sota l'assot de la guerra. Caldria estudiar-ne a fons les causes, encara que alguns cooperadors ja han posat el crit al cel respecte a les lectures que se'n fa des d'occident. El petroli, i el tràfic d'armes sembla que hi tenen molt a veure i els interessos de les multinacionals -que no són pas africanes- també. En qualsevol cas -com gairebé sempre- qui menys culpa en té i més pateix, és la mal anomenada població civil, és a dir tots aquells éssers humans que no volen que la guerra i la competitivitat siguin el seu mitjà habitual de vida. Davant això la coordinadora d'ONGD han emès una nota que copio:



Coordinadora de ONGD exige que se proteja a la población civil en Malí

- Ante la intensificación del conflicto armado en Mali, la comunidad internacional y los diferentes actores armados debe garantizar la protección y seguridad de la población civil y su acceso a la ayuda humanitaria
- Según datos de Naciones Unidas, más de 30.000 personas han abandonado sus casas durante el pasado fin de semana. Una cifra que se une a las más de 146.000 refugiadas en países vecinos y más de 200.000 desplazadas internas (80% de ellas mujeres y menores)
- La situación en los países limítrofes y en Malí es crítica debido a la grave crisis alimentaria a la que se enfrenta la región; comienzan a multiplicarse las enfermedades como malaria, diarrea e infecciones respiratorias
- El pasado año, Naciones Unidas solicitó 123 millones de euros para dar respuesta a esta emergencia; hasta el momento sólo se han recaudado 77 millones y la ONU ya anuncia un nuevo llamamiento para este año de otros 195 millones
Madrid 16 de enero de 2013. La Coordinadora de ONG para el Desarrollo muestra su enorme preocupación por las consecuencias humanitarias de la intervención militar internacional en el norte de Malí. Los combates supondrán un recrudecimiento del conflicto armado que vive el país desde hace ya varios meses y que golpea directamente a la población civil. Las personas desplazadas –tanto en el interior del Malí como hacia países vecinos- ascienden ya a 400.000 y todo apunta a que ese número vaya en aumento en los próximos días.
La Coordinadora de ONGD hace un llamamiento para que las partes implicadas en el conflicto eviten los daños a la población civil y garanticen su acceso a la ayuda humanitaria, en particular para que llegue a las personas de las zonas más afectadas y aisladas por el conflicto. El derecho internacional humanitario debe ser plenamente respetado por todas las partes del conflicto.
A las consecuencias del conflicto, se añade la crisis alimentaria que desde hace meses afecta a la región. Las ONGD en la zona alertan sobre graves consecuencias para la población maliense y de los países vecinos; las condiciones sanitarias, de seguridad alimentaria y de vivienda están empeorando notablemente. Una situación que puede agravarse más aún en la primavera cuando la gente acaba sus reservas de alimentos entre una cosecha y otra.
Más información – Ficha de Naciones Unidas con información actualizada

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